- Bésame.
Tap, tap, tap, tap.
Sus dedos tamborileando sobre la mesa.
- Inútil.
Clink, clink, clink, clink.
El hielo chocando contra su copa.
- Normalmente nadie se arrepiente de ello.
Hgg.
Qué ironía.
- Yo no soy tan fácil.
Ah.
Suspiros interminables.
- Me subestimas.
Tum tum, tum tum.
Mi corazón acelerado.
- No voy a volver a tocarte.
Hah.
Más bien sarcasmo.
- Tú te lo pierdes.
Glup, glup, glup.
La bebida bajando por su garganta.
- Sólo lo haré porque te deseo.
Mentía.
En realidad le quiero.
- ¿Lo ves?
Sonrisa.
Satisfactoria, podría decirse.
- Eres estúpido.
Mierda.
Le estaba besando otra vez.
- Soy irresistiblemente estúpido.
Mm.
Quizás es verdad, al fin y al cabo.
- No creo que ésto acabe bien. Es como andar incómodo con zapatos que no son de tu talla.
Mirada.
Que pude sentir hurgando en mi interior.
- Conmigo puedes andar descalzo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario